En la era de la tecnología vivimos conectados a dispositivos móviles. Desde el smartphone que va con nosotros a todas partes, hasta las neveras inteligentes capaces de plantear la lista de la compra en función de los alimentos que contienen. En definitiva, gran cantidad de datos perceptibles de ser analizados a través de Big Data.
Aunque te resistas a dar tus datos y vigiles con cautela toda la información referente a tu persona, el simple hecho de acceder a internet o a una cuenta de gmail desde un smartphone hace que tus datos vuelen por la red.
Gracias al análisis de datos obtenidos a través de sistemas inteligentes como móviles las empresas pueden definir con mejor carácter una estrategia de comunicación.
Móviles, tablets y Televisión inteligente, datos para Big Data
El cuño “teléfono inteligente” se aplicó en su día con fines comerciales, pero con el tiempo adopta más sentido. Estos teléfonos tienen mucha más capacidad para almacenar datos y aplicaciones, hasta el punto que parecen pequeños ordenadores de bolsillo. Los teléfonos hoy en día sirven para todo, donde tener una conversación telefónica casi parece de otra era.
En los móviles podemos instalar aplicaciones de mensajería instantánea como es el caso de Whatsapp. Para ello, nos exige que tengamos una cuenta Gmail y además nos propone que enlacemos la cuenta con Facebook y de rebote con Instagram. Parece increíble pero solo por tener una aplicación nuestros datos se pueden llegar a compartir en dos redes sociales y una cuenta de mensajería de email. Puede que no uses estas redes sociales pero tus datos ya estarán en la red.
Con herramientas de Big Data podemos analizar las preferencias de los usuarios, incluso su ubicación en tiempo real lo que permite a las empresas lanzar cupones de descuento geolocalizados. Por ejemplo, en el caso de una cadena de comida rápida tipo McDonalds, se pueden lanzar a los smartphones cupones de descuento cuando una persona pasa en un radio de 30 metros y en horas puntuales relativas a la comida y la cena. La finalidad es atraer a esa persona hacía el establecimiento. Es una estrategia de geomarketing.
Con las tablet sucede algo similar, aunque es menos común desplazarse con ella, mucha gente la utiliza en el sofá o en el lugar de trabajo. Es ideal para aplicar estrategias de marketing dirigidas a captar leads a través de suscripciones. Es un buen soporte para realizar lecturas más largas, ya que su pantalla es mucho más grande.,
Por último las televisiones inteligentes. Estas han entrado en los hogares de una forma más lenta, pero hoy en día es complicado encontrar una televisión que no se denomine “smart tv”. Estas plataformas recogen mucha información sobre los programas televisivos, series y películas que tienen más demanda, incluso permite detectar target de público específico repartidos en distintas horas del día. Analizar a través de Big Data el consumo de estas plataformas permite establecer la preferencia de la audiencia. De hecho, Netflix es un caso de estudio que ha aplicado Big Data para detectar los gustos de sus clientes por los géneros y, a partir de aquí, ha sido capaz de lanzar su propio producto con éxito.
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