La gamificación se ha instalado en algunas empresas para impulsar la participación en los cambios de filosofía hacía una cultura CRM. Pero la gamificación tiene muchos más recursos, entre ellos, su integración dentro del marketing.
La gamificación consiste en aplicar dinámicas de juego, en el caso del marketing para atraer más clientes y convertiros en activos. Se trata de transformar una experiencia en un juego, incluso algunas empresas lo ha aplicado como metodología del marketing de guerrilla.
Marketing de guerrilla y gamificación
Uno de los últimos ejemplos donde se integra el marketing de guerrilla y la gamificación fue el evento publicitario que montó la marca francesa de agua Contrex, donde se instalaron varias bicicletas en la calle y las mujeres que pasaban por allí se suben a las bicicletas y comienzan a pedalear, con cada pedaleo una imagen de un hombre en una pared va realizando un striptease, cuando se acerca el final, la imagen llena de luz saca un cartel tapándose y mostrando las calorías que han consumido, al final se les ofrece beber el agua. Este sería un ejemplo a lo grade de gamificación, porque las mujeres participan y juegan, y marketing de guerrilla.
Gamificación a pequeña escala
Pero se puede hacer todo mucho más sencillo, integrando de forma más simple la gamificación como son los programas de fidelización. Desde una pizzeria hasta un supermercado o gasolinera puede llevarlo a cabo este recurso.
Un ejemplo es la cadena Starbucks, que puso en marcha una aplicación de lealtad a través del móvil, que contaba con una forma rápida de pago y un sistema basado en incentivos. La marca otorgaba puntos virtuales e insignias como recompensas cada vez que se utilizaba la aplicación móvil para pagar una transacción. Cuando el usuario alcanza el primer hito de 5 estrellas es recompensado con un “nivel verde” y gana una ventaja especial, en concreto, un café o té gratis ese día. Es solo alguno de los beneficios que obtiene un usuario o cliente de la maca.
Otra forma de incluir gamificación en el marketing son los famosos rascas en las tarjetas de fidelización. Un ejemplo, la empresa de cosmética Yves Rocher. Además, de disponer de una tarjeta de fidelización donde acumular puntos, envían a las clientas tarjetas con los productos en promoción y, en algunas de ellas, incluyen juegos de rascas. Estos son juegos simples, si al rascar las tres opciones obtienes las tres mismas figuras, ganas un descuento o un regalo por tu compra en la tienda.
La gamificación puede ser un recurso, que bien aplicado, impulsa el marketing y la venta de productos, y por otro lado, ayuda a fidelizar a los clientes. A veces encontramos gamificación en lo más sencillo y casi no lo consideramos, como hace Nocilla y los lanzamientos de vasos personificados; o Coca-Cola y su lanzamiento de latas con nombres; en ambos casos nos incitan a jugar a coleccionar todos los vasos o encontrar tu nombre.
Gamificación a fin de cuentas, una de las formas innovadoras para hacer campañas de marketing y una forma divertida de atraer al usuarios hasta nuestra marca y hacerle vivir una experiencia vinculada a la marca nueva y diferentes.
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