Los datos han pasado de puntillas por los despachos de las empresas durante muchos años. En la reuniones sólo se analizaron datos básicos de compraventa, como mucho número de quejas o reclamaciones. Pero no se analizan grandes volúmenes de datos a través de Big Data ni se basan las estrategias en ellos, hasta ahora.
Big data es una forma nueva de hacer negocios, que facilita la toma de decisiones en una empresa y permite mejorar la relación con los clientes. Esta estrategia no se limita a analizar los datos que recoge la empresa, es decir, datos propios como compras, ventas, repercusión de acciones de marketing. Sino que puede integrar datos de terceros como información sobre censo de la población, estadísticas de consumo de determinados productos o tendencias actuales. De esta forma, cruzar datos internos y externos proporciona a la empresa una ruta o camino a seguir en la toma de decisiones bien para enfocar un producto como para regenerar nuevos servicios.
El 62% de ejecutivos consideran las ventajas de Big Data
El 62% de los ejecutivos que han participado en la quinta encuesta IQ digital de PwC creen que Big Data puede ofrecer una ventaja competitiva empresarial. Sin embargo, el 58% considera que visualizar los datos correctamente es todo un desafío.
Desde el punto de vista de los directivos, al combinar grandes volúmenes de datos se pueden extraer gran nivel de información, donde la visualización de esta puede ayudar a mejorar los procesos de negocio. De hecho, casi dos quintas partes de los 1100 encuestados consideran invertir más en la visualización de datos a través de Big Data.
No es ningún secreto que a menudo las empresas carecen de profesionales expertos en análisis de grandes volúmenes de datos. Para ello es necesario formación y profesionales con capacidades y habilidad para comprender e interpretar los datos, de tal forma que puedan aplicarse en áreas como marketing, ventas o estrategia empresarial.
Por otro lado, Big Data requiere una inversión en tecnología. Es necesario un software o herramienta con capacidad para análisis de grandes volúmenes de datos en tiempo real, así como infraestructura informática.
Un alto porcentaje de encuestados está de acuerdo con la afirmación: “Nuestros sistemas no pueden procesar grandes volúmenes de datos de diferentes fuentes”.
De aquí la necesidad de renovar en las empresas y organizaciones las infraestructuras informáticas. El Big Data a gran escala requiere herramientas con capacidades de análisis avanzadas.
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