En la era del cliente digital los profesionales del marketing se estrujan el cerebro cada día con el fin de preparar acciones que lleguen al corazón del cliente, capten su atención y curiosidad. Todo ello con la finalidad de lograr fidelizar al consumidor a largo plazo y convertirlo en un heraldo de la marca.
Porque el marketing ya no se limita a vender de forma puntual. Los nuevos clientes que pivotan de marca en marca buscando la mejor oferta, la mejor experiencia y la mejor calidad – precio, se requiere una profundidad en la captación del consumidor.
En los tiempos donde la crisis predomina el pensamiento de los consumidores hacen falta dosis de felicidad. Aquí os proponemos como hacer un marketing positivo, que emocione y sea difícil de olvidar, también llamado “marketing de la felicidad”.
Las claves del marketing de la felicidad
Imágenes alegres y positivas: Ya tenemos en las noticias una extensa galería de imágenes dolorosas y tristes, así que obviemos esto en el marketing y en nuestro spot publicitario. Tratar de elegir imágenes que sean alegres, que transmiten felicidad en situaciones reales y cotidianas, donde cualquier consumidor pueda sentirse identificado y desarrollar un sentimiento de alegría.
La risa es la cura: No solo las imágenes pueden ser divertidas y arrancar una risa al consumidor, sino el texto o los comentarios que en ellas se incluyen. La risa es la cura de todos los males y a la vez genera una viralidad inimaginable. De hecho, solo tenemos que ver que imágenes inundan las redes sociales, imágenes que de una modo u otro te hacen reír. La ciencia apunta que las hormonas nos ayudan a viralizar todo texto o imágenes graciosos, porque nos gusta compartir esa sensación de felicidad.
El chamán del “buen rollito”: Una actitud positiva de la marca y un marketing que incite al buen rollito. Inicitar a salir, a estar con los amigos, a divertirse, a recordar momentos de la infancia que nos traen una dulce nostalgia. En las redes sociales triunfan aquellos que caen bien, que transmiten unas buenas vibraciones y son capaces de animar. A pesar de que en ocasiones estas plataformas están llenas de “llorones”. Siempre logran más comentarios y seguidores aquellos que se muestran más amigables y con ganas de ser felices. Pues lo mismo ocurre con el marketing.
Salvar el estado de crisis: En algunas ocasiones el marketing comete graves errores. La acciones que realizamos se nos van de las manos y puede afectar los sentimientos o la sensibilidad de algunas personas. Si recibimos críticas y quejas lo mejor es solucionarlo con la mayor rapidez posible. Es mejor solucionar un problema, dado que este hace sentir a los consumidores infelices. Si somos abandonamos la fidelidad por la marca y el estatus de cliente activo. Además, del riesgo a dañar la imagen de la marca, mucho más difícil de recuperar.
Innova y sorprende: La clave de una acción de marketing que surge efecto inmediato y duradero en el consumidor es la innovación y el factor sorpresa. Para ellos puedes utilizar cualquier estrategia de marketing, desde el de guerrilla hasta la gamificación. Los sentimientos que pueden desarrollarse en un consumidor cuando disfrutan de una sorpresa quedan grabados en el tiempo mucho más tiempo. Si además hacemos participar al consumidor en las acciones de marketing, recordará y contará este hecho a sus amigos como una de sus mejores anécdotas.
Viralizar, hacer reír, divertir, innovar, sorprender, todo ello es necesario en el marketing de la felicidad, porque se trata de captar consumidores a través de la emoción que mantiene vivo el corazón.
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