Llegar y conquistar al usuario o cliente es el objetivo de cualquier marca. Para lograrlo hacen uso de estrategias de marketing de distinta índole: experiencial, colaborativo, 306 grados… Pero en 2017 llega pisando fuerte, gracias a la tecnología, el marketing interactivo.
Pasamos de ver anuncios en televisión, escuchar cuñas publicitarias en radio y leer anuncios en periódicos a participar directamente en cada estrategia publicitaria, formando una pieza del puzzle. Ahora, con la publicidad interactiva, damos un salto más allá en participación y colaboración marca – usuario.
Vivir una experiencia a través de la publicidad
Las marcas han trabajado y mejorado a lo largo de los años con el fin de llegar al consumidor. Comenzaron a integrar las historias comunes, narrativas donde el consumidor se sintiera identificado, mostrando empatía por historias reales. Después, llegaron las redes sociales, donde el marketing se fusionó con el engagement y las marcas median la simpatía que los usuarios sentían hacia ellos, analizando sus preferencia y ajustándose aún más a sus gustos.
Más tarde, se integró al usuario en la publicidad. Se le hizo partícipe con el marketing experiencial. En cualquier momento podía ser una pieza más de la campaña publicitaria. Algunas marcas optan por el flashmob, otras por la gamificación. El objetivo era que el consumidor viviera una experiencia real.
Con la evolución de la tecnología aparece el marketing interactivo. Enfocado a la participación del internauta y a proporcionarle una experiencia interactiva. Estas campañas pretenden que paso a paso el consumidor profundice en una historia y navegue por ella. La finalidad es que se divierta, conozca los valores de la marca y el estilo, así como un producto o servicio concreto.
Según varias investigaciones, cuando interactuamos y vivimos una experiencia entorno a una marca está la recordamos mejor, mucho mejor que el simple hecho de verla en televisión o escucharla en radio. Además, compartimos las experiencias que son gratas para nosotros, aquellas que nos hacen vivir buenos momentos.
Es una estrategia de marketing que ayuda a sumergir al consumidor en el corazón de la marca. Además, tiene la versatilidad de mostrarse en soportes móviles, es decir, smartphones y tablets. Por tanto, se puede interactuar con ellos en cualquier lugar y momento del día, así como acceder desde redes sociales y soportes web.
Los primeros pasos del marketing interactivo
A día de hoy ya existen plataformas donde se pueden generar anuncios con carácter interactivo, como es Facebook Canvas. Por el mismo precio que cualquier otro anuncio, permite incluir una navegación interactiva de imágenes, vídeo, texto y botones con link. Esto solo es el principio que irá evolucionando con el tiempo.
También hay medios digitales donde la publicidad interactiva tiene un lugar de excepción. Es el caso de la revista digital Vis a Vis, de lectura exclusiva en iPad. Navegar por esta revista ya es una experiencia en sí, donde la gamificación y la interactividad forman parte de cada narrativa, reportaje y entrevista. Pero la publicidad también tiene un lugar destacado.
Marcas de vehículos o banca online han colgado sus anuncios interactivos entre sus páginas digitales. Donde permite al usuario desde configurar los accesorios del vehículo hasta sobrevolar ciudades en avión, spot que tienen como finalidad la venta de un vehículo o la de un vuelo low cost se convierten en auténticas experiencias.
La interactividad en marketing avanza a pasos de gigante dejando atrás el marketing tradicional.
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